Pedro Eleuterio Duro Chica es nuestro protagonista de esta semana en FuenlaLeyenda. Criado futbolísticamente sobre la tierra del Campo de Tiro de Leganés, Lute como es conocido en el mundo del fútbol, empezó a decantarse por la portería en El Terromoto del barrio de Zarzaquemada. Después, el Leganés llamó a su puerta en edad infantil hasta llegar al primer equipo.

"En el fútbol he hecho lo que he podido, y eso sí, lo he disfrutado al máximo", reconoce. No sólo lo ha hecho él, si no que ha hecho disfrutar a todos los que le han visto y a los que han jugado a su lado. Con su calidad bajo palos fue un icono en el Fuenlabrada desde que llegó en el año 85 procedente del Lega.

"El primer año conseguimos el ascenso de Preferente a Tercera", señala. Pedro, no exento de calida y unos reflejos al alcance de pocos, era un trabajador innato. Eso le hizo ganarse la confianza de todos los entrenadores. "Llegué en el 85 y estuve hasta el 94, en esas temporadas me perdí muy pocos partidos".

Las casualidades hicieron que en su primer año consiguiera su primer ascenso, con Mancebo en el banquillo y en la 93-93, su última temporada, conquistara el segundo esta vez de Tercera a Segunda B con José María Martínez en la caseta. "Creo que soy de los pocos jugadores que ha conseguido dos ascensos con el Fuenla". De todos esos años recuerda a muchos compañeros, especialmente de la etapa en Tercera pero hay uno del que guarda un cariño especial. "Siempre le tendré un cariño especial a Curro. Él y yo decimos que somos uña y carne".

Una vez colgó los guantes, se sacó el título nacional de entrenador. Cinco años entrenando a los porteros del primer equipo del Fuenla para después continuar su trayectoria en el Juvenil A del Móstoles, Real Madrid, Getafe, Trival, Alcorcón o Valdemoro. Lute es "un ilustre del fútbol madrileño", como le definen muchos de los periodistas que cubren la información de los equipos de la Comunidad.

Lute sigue manteniendo vivo el carisma que tuvo como portero y guarda el recuerdo de un deporte que lo fue todo para él. "De todos los años que estuve en el fútbol me quedo con la ilusión de un niño que cumplió sus sueños. Estoy orgulloso de haber podido llegar al primer equipo del Leganés y de los ascensos y las temporadas que pude brindar en Fuenlabrada".

No quiso dejar pasar la oportunidad para dedicar unas palabras al Fuenla, un equipo que considera como suyo. "A mi el Fuenla me ha dado mucho. Lo llevaré en la sangre y siempre le desaearé , ojalá que podamos volver pronto a Segunda porque el Club y la ciudad se lo merece".